Cómplice

Me paso para hablaros de la que probablemente sea una de mis mejores lecturas del año, aunque estemos en el mes de febrero, puedes llamarme aventurera y ojalá haya otra lectura que lo supere porque significaría disfrutar más que lo que he hecho leyendo «Cómplice» de Steve Cavanagh gracias a Roca Editorial.

Daniel Miller, más conocido como Sandman, el Hombre de Arena, asesinó a catorce personas antes de desaparecer. Ahora, su esposa Carrie se enfrenta a un juicio como cómplice. El FBI, el fiscal del distrito, los medios de comunicación y prácticamente toda la población del país cree que ella lo ayudó a encubrir los crímenes. Eddie Flynn, convencido de la inocencia de su cliente, debe demostrar al jurado y al mundo entero que Carrie Miller fue solo otra víctima de su marido, que desconocía su lado oscuro y nunca participó en los asesinatos. Pero hasta ahora, Eddie y su equipo son los únicos que lo creen.

Me encantan los libros acerca de juicios, pero de juicios de esos en los que todo es complicado con jurado popular y en Estados Unidos donde todo es super majestuoso. Así que la primera vez que leí a este autor con «13» me enamoré y me supo a poco así que cada vez que se ha publicado algo suyo en nuestro país he ido de cabeza a leerlo y la sensación ha sido siempre maravillosa, hasta llegar a este último en el que he alucinado de la capacidad del autor para llevar al lector por donde quiere.

La forma que tiene el autor de meternos de lleno en la historia es alucinante estamos ante uno de esos libros que no puedes dejar de leer. La ambientación es magnífica logrando estar dentro de esa sala donde se produce el juicio e incluso sentirte como uno más. La inteligencia, astucia y el modo de llevar el juicio de Eddie Flynn te mantiene absorto y expectante porque nunca sabes por donde te va a salir.

Los diálogos son perfectos, no sobra nada, todo medido milimétricamente para que nos creamos lo que nos cuentan para que luego haya algún giro que te podías imaginar, sobre todo si ya has leído los libros anteriores de la serie y también alguna sorpresa que no me imaginaba, eso es lo mejor.

Poco más quiero contaros porque no se puede desvelar nada, hay que dejarse llevar, meterse de lleno en esa vorágine de Nueva York, en esos juicios mediáticos, sorprenderte por los giros que se van produciendo a medida que avanza el juicio y, evidentemente no sacar ninguna conclusión hasta la última palabra del libro, literal.