Algunos días de abril

Jordi Sierra i Fabra, no cuenta entre los lectores con la fama que realmente le correspondería ya que es un escritor con una extensísima producción literaria y un estudioso de la música pop desde finales de los años 60 hasta el punto de ser uno de los fundadores del programa de la Cadena Ser "El Gran Musical". Jordi Sierra i Fabra comenzó a escribir a muy temprana edad siendo por ello que con doce años ya tenía escrita una novela de quinientas páginas. Autor también de literatura infantil, juvenil y de adultos, había publicado hasta el año 2021 un total de 527 libros. Es conocido en las escuelas por su libro "El asesinato del profesor de Música". En el año 2004 inauguró “Fundación Jordi Sierra i Fabra de Barcelona”, una entidad privada, sin ánimo de lucro financiada por su impulsor, con el objetivo primordial de ayudar a jóvenes escritores al inicio de su carrera literaria, además de fomentar el placer por la lectura como vehículo esencial de formación. Esta fundación otorga anualmente el Premio literario Jordi Sierra i Fabra para jóvenes.

Hace unos años descubrimos la serie del inspector Miquel Mascarell y su inseparable amigo David Fortuny perfectamente ambientada en uno de los periodos más convulsos de la reciente historia de España, en la Barcelona de los años cincuenta. Como ya auguramos en la reseña de “Algunos días de noviembre”, la serie protagonizada por Miquel Mascarell y David Fortuny está demostrando que, por suerte, tiene un largo y exitoso recorrido por delante.

“Algunos días de abril” es el catorceavo caso del exinspector Mascarell, casi nada. Para aquellos que se muestren reticentes a la hora de iniciar la lectura de “Algunos días de abril”, deciros que tiene un final autoconcluso y que, gracias a las continúas pinceladas de información que nos va facilitando Jordi Sierra i Fabra sobre los personajes, el lector podrá perfectamente seguir el hilo de la trama y la historia personal de nuestros protagonistas.

A efectos de poder introduciros en la trama, os diremos que Miquel Mascarell es un ex inspector de la República, represaliado por Franco, condenado a muerte que estuvo cautivo durante ocho años y medio en el Valle de los Caídos y que fue liberado e indultado por un extraño azar en julio de 1947. Ahora, junto a David Fortuny ejerce de detective privado.

En “Algunos días de abril”, Miquel Mascarell y David Fortuny reciben en su agencia de detectives la visita de Montserrat Blanco, una mujer que quiere confirmar si su marido murió o no en la guerra ya que quiere volver a casarse. Han pasado trece años desde el final de la Guerra Civil y apenas quedan testigos de los últimos días en los que Benito García dio señales de vida. De buenas a primeras, el caso podrís resultar bastante muy sencillo ya que bastaría con transmitirle a su esposa que Benito García murió en la guerra, pero eso no va con Mascarell quien según sus propias palabras: “Soy paciente. Muy paciente. Si investigo algo, tarde lo que tarde doy con ello”.

Es mucho el tiempo que ha transcurrido desde que no se tienen noticias de Benito y tratándose de la guerra civil donde tantísima gente desapareció y cuyo recuerdo sigue muy presente entre la población, la gente es muy reacia a hablar, solo quiere callar, olvidar y no meterse en líos, por lo que la investigación se vislumbra muy difícil ya que prácticamente no tienen hilos de los que tirar para reconstruir el último periodo de vida de Benito García, no quedándoles más remedio que buscar entre el grupo de amigo que, junto a Benito García, se marcharon a pelear por la democracia en 1936.

¿Está vivo Benito García? Y si es así, ¿por qué no ha dado señales de vida en trece años? Si está vivo, ¿por qué no volvió a casa? ¿Es posible que robara y engañara a sus amigos para hacerse rico?

De la mano de Miquel Mascarell y David Fortuny nos adentraremos en una investigación minuciosa, detallada, precisa donde nuestros detectives irán dando pasitos cortos hasta poder averiguar qué fue realmente lo que ocurrió con el desaparecido Benito García.

El personaje de Miquel Mascarell que ha creado Jordi Sierra i Fabra destaca por sus métodos, su técnica y profesionalidad. Es constante y persuasivo, nunca deja una investigación a medias. Su ética lo lleva a profundizar hasta el final del caso, su objetivo es hacer justicia a la humanidad convirtiéndolo en uno de los personajes policiacos más atractivos del género.

“Algunos días de abril” sale nuevamente a relucir la maestría que atesora Jordi Sierra i Fabra con su estilo tan personal y adictivo que hace que la lectura fluya y el ritmo no decaiga haciendo que el lector pueda disfrutar de unos magníficos diálogos perfectamente contextualizados en el momento histórico y sociocultural en el que se desarrolla la trama, aportando pasajes verídicos, con detalles, fechas, datos y descripciones rigurosas de la ciudad de Barcelona.

“Algunos días de abril”, Jordi Sierra i Fabra y ex inspector Miquel Mascarell son sinónimos de entretenimiento y estamos seguros que esta nueva entrega os encartará.