El último árbol del paraíso

Hoy os hablo de la primera novela que leo de Emma Lira que lleva por título «El último árbol del paraíso» editado por Espasa. Una historia de aventuras, de amor y de aromas que consiguen traspasar las páginas del libro.

En «El último árbol del paraíso» conoceremos a Gabriel de Velasco que es el tercer hijo de una familia extremeña que siguiendo las costumbres de la época decide que su hijo se dedique a la vida religiosa. De esta forma ingresa en el Colegio de los Jesuitas, donde descubre el apasionante mundo de la botánica, conociendo todas las hierbas y sus usos gracias a un monje, André.

Paralelamente a esta historia nos trasladamos a las islas Molucas donde Cintia cobra protagonismo absoluto para mostrarnos una vida apasionante y también dramática, en un lugar maravilloso donde vive junto a su tía Elionora y su prima Cornelia.

A medida que iba avanzando en la lectura de esta novela me iba sorprendiendo cada vez más. Tras leer la sinopsis de la editorial pensaba que el protagonista total iba a ser Gabriel y así es al principio de la misma pero luego todo cambia y Cintia y su entorno pasan a ser los imprescindibles en esta aventura. Es cierto que ambos coinciden en un momento de la novela, pero nunca volverá Gabriel a ser protagonista.

En «El último árbol del paraíso» nos encontramos con unos escenarios evocadores, unas islas desconocidas, unos lugares llenos de contraste donde las especias cobran un papel fundamental, en concreto, el clavo, que les acompañará por un camino en ocasiones complicado ya que el clavo era una de las especias más deseadas.

En esta historia que se podría definir como una novela de aventuras viajaremos desde España hasta tierras desconocidas, donde el absoluto protagonismo lo tiene la naturaleza, unas islas donde las especias exóticas son parte de la vida de sus habitantes, donde todos quieren ser los primeros y únicos en cultivarlas y explotarlas y así surge la guerra por ellas. El uso de especias desde la Antigüedad hizo que su comercio fuera una de las actividades más lucrativas durante siglos especialmente en la cuenca del Mediterráneo. Esta ruta unió durante años Asia con Europa Occidental y sirve de escenario para esta historia en la que sus sabores, sus olores y su paisaje se impregna en cada página.

Pero Emma también aborda cuestiones de interés como el choque cultural, la explotación de los recursos de los países más pobres, la relación entre poderes económicos y políticos… temas que encontramos en «El último árbol del paraíso» y que denotan la maldad del ser humano y sus intereses por encima de otras cuestiones más humanas.

La novela no tiene un ritmo trepidante, más bien, se lee con calma, fijándote en los detalles, en la forma de narrar de su autora que con una prosa envolvente y detallista va haciendo que el lector se vaya interesando por la historia de estos jóvenes y queriendo saber qué les deparará el futuro. Porque además de ser una novela muy bien detallada en cuanto a datos históricos hasta ahora poco explotados en los libros, también es una historia romántica, una historia donde la vida de sus protagonistas pasa a un primer plano y el lector no puede hacer nada más que empatizar con ellos hasta el final.

Os recomiendo que le deis una oportunidad a «El último árbol del paraíso» porque no os decepcionará y porque creo que podréis encontrar una historia distinta con la que pasar un buen rato de lectura.