La piedra del amor
Comenzar el colegio es uno de los momentos más cruciales en la vida emocional de un niño. Para muchos, es la primera experiencia de separación prolongada del entorno familiar seguro, un paso lleno de emociones contradictorias: entusiasmo, miedo, inseguridad, curiosidad. En este contexto, el cuento La piedra del amor. Enzo empieza el cole se presenta como una herramienta sensible y amorosa para acompañar esa transición.

AUDIO RESEÑA
La historia gira en torno a Enzo, un niño pequeño que se prepara para iniciar el colegio. Aunque hay una parte de él que se siente entusiasmada con la idea de aprender cosas nuevas y conocer amigos, también aflora el temor: nunca se ha separado de su familia, y la idea de estar solo en un entorno desconocido lo abruma.
Para ayudarlo a transitar este cambio, sus padres le entregan un pequeño objeto muy especial: una piedra rosa que llaman la piedra del amor. Le explican que esa piedra estará con él durante todo el día, y que cuando la toque, podrá recordar cuánto lo quieren, aunque ellos no estén físicamente cerca. Así, la piedra se convierte en símbolo de amor incondicional, presencia emocional y seguridad.
Nos ha gustado esta historia porque su autora trata de forma dulce pero sincera el paso tan importante de empezar el colegio. Dándole la importancia y validez necesaria a las emociones infantiles sin dramatizarlas ni minimizarlas.
La prosa de Marta Prada es sencilla y directa, adecuada para el público al que va dirigido. La historia está narrada en frases breves, con vocabulario claro, y se apoya mucho en lo visual para transmitir los matices emocionales de Enzo. El formato del libro incluye solapas interactivas, lo que permite a los pequeños lectores descubrir detalles ocultos en las ilustraciones.
La piedra del amor funciona como un “objeto transicional” similar a un peluche o una manta que el niño asocia con la figura de apego. Este tipo de objeto ayuda al niño a sostener la angustia de la separación, facilitando el desarrollo de la autonomía emocional.
Además, el libro abre la puerta al diálogo familiar. No es solo una historia para leer y cerrar, sino un disparador de conversaciones importantes: ¿cómo te sientes cuando mamá y papá no están?, ¿hay algo que te gustaría llevar contigo para recordarnos?, ¿quieres que hagamos juntos tu propia piedra del amor?
En tiempos donde la educación emocional cobra cada vez más relevancia, libros como este se convierten en aliados imprescindibles. No solo ayudan al niño a comprender lo que siente, sino que también empoderan a las familias para acompañar esos procesos con amor, respeto y herramientas prácticas.



Hay verdaderas maravillas para los peques, para poder ir enseñándoles tantas cosas.
Besotes!!!