Antes, entonces, nunca

Me enfrento a la reseña de este libro después de dejar reposar su lectura, una lectura que se convierte en adictiva.

«Antes, entonces, nunca» se podría decir que es un melodrama, melodrama escrito de forma magistral por Raúl Ariza, una novela que viene a importunar al lector, a remover sus emociones y sentimientos.

No voy a desvelar nada de la sinopsis de este libro quiero que todos se acerquen a esta lectura vírgenes, sin saber nada más de ella, nada más que es una historia que merece ser leída.

El autor estructura la novela en tres partes bien diferenciadas, una trama clara y precisa que gira en torno a un personaje principal, que nos relata sus obsesiones. Sin apenas diálogos el autor se vale de una prosa magnífica para guiarnos por esta historia que no te dejará indiferente.

En la primera parte titulada “Lo que sucedió antes” narrada en primera persona, un hombre nos cuenta su infancia, sus orígenes, y describe de una forma absolutamente maravillosa todo lo que acontece. Poco a poco vamos conociendo a un personaje obsesivo, que se va convirtiendo en un ser monstruoso, un ser que, como Narciso, tiene magnetismo, brilla por sí mismo y se valdrá de ese poder para dominar y utilizar a los demás, en especial a las mujeres hasta que se cruza en su camino Lía.

En esta parte del libro Raúl nos detalla numerosas películas y libros que forman parte de la vida de nuestro personaje. Y también aquí empieza el declive.

En la segunda parte “Lo que sucedió entonces”, narrado en segunda persona, cosa que me ha sorprendido y gustado a partes iguales, el autor nos muestra un personaje totalmente hundido, acabado, que ha bajado al infierno y del que difícilmente podrá retornar. Aquí cobra protagonismo Perry, su fiel amigo que le acompaña y le ayudará.

En la última parte “Lo que nunca sucedió” Raúl se vale de una tercera persona y en tiempo futuro para mostrarnos al verdadero personaje, alguien que se nos presenta como cobarde, incapaz de enfrentarse a sus miedos y que no puede amar a nadie, sólo a sí mismo.

«Antes, entonces, nunca» es todo un alarde de buena literatura, una historia original que nos muestra una obsesión y como esto influye en la vida de este personaje. De lectura adictiva, cada capítulo deja siempre con ganas de más, de querer ahondar en el personaje, de querer descubrir lo que el autor ha querido transmitir con este libro. ¡Yo de vosotros no me lo perdería!

Agradecer a la Editorial el haberme hecho llegar un ejemplar para su lectura y reseña en el blog.