Los señores del tiempo

A estas alturas, poco se puede añadir respecto al tremendo éxito que Eva García Sáenz de Urturi ha conseguido con su Trilogía de la Ciudad Blanca: más de 700.000 lectores, más de 35 ediciones de sus novelas y la recién estrenada película basada en “El silencio de la ciudad blanca” que dirige Daniel Calparsoro con Javier Rey, Belén Rueda y Aura Garrido, rutas guiadas sobre la novela por la ciudad de Vitoria…

Éramos muchos los que teníamos enormes ganas de poder leer el desenlace de esta magnífica trilogía y, por suerte, ya tenemos aquí “Los señores del tiempo”, la última entrega con la que Eva García Sáenz de Urturi echa el cierre a la Trilogía de la Ciudad Blanca.

Como os acabamos de indicar, “Los señores del tiempo” es la tercera y última novela de la Trilogía de la Ciudad Blanca, de manera que si no habéis leído todavía las anteriores entregas debemos recomendaros que abandonéis la lectura de esta reseña porque, aunque no vayamos a hacer spoiler, sí que es posible que hagamos referencia a hechos, datos y personajes que debéis descubrir en “El silencio de la ciudad blanca” y en “Los ritos del agua”.

En “Los señores del tiempo”, como no podía ser de otra forma, volveremos a caminar por las calles de Vitoria y pueblos de alrededor de la mano de Unai López de Ayala, Kraken, su mujer Alba, su compañera Estibáliz y el eterno abuelo de Unai. Nuestros protagonistas llevan un tiempo disfrutando de cierta tranquilidad hasta que Unai y su familia deciden asistir a la presentación de la novela “Los señores del tiempo”, un libro que está arrasando en las librerías de la ciudad y causando mucho revuelo entre los lectores, no solo por su argumento sino porque se desconoce por completo la identidad de su autor. El día de la presentación, la expectación era enorme por descubrir el rostro de la persona que se encontraba detrás del pseudónimo de Diego Veilaz. Sin embargo, la presentación se verá enturbiada cuando, sin todavía haber comparecido el escritor de la novela, dentro del propio palacio de Villa Suso, descubren que Antón Lasaga, dueño y fundador de un imperio de ropa, ha sido envenenado mediante cantárida.

Pronto, Kraken descubrirá que el asesinato sufrido Antón Lasaga guarda una enorme similitud con uno de los crímenes que aparecen descritos en la propia novela de “Los señores del tiempo” inspirada en la Vitoria medieval de finales del siglo XII, por lo que tendrán que enfrentarse a a un asesino que está reproduciendo los crímenes de “Los señores del tiempo”.

Si hay algo novedoso en “Los señores del tiempo” con sus predecesoras entregas es que nos vamos a encontrar dos novelas en una. Nos explicamos: Eva García Sáenz de Urturi nos ofrece alternativamente dos historias, una en la actual Vitoria de 2019 y otra ambientada en la Vitoria del siglo XII, lo que conllevará que la novela alterne capítulos relatados por narradores diferentes, Unai en el presente y Diago Vela en el pasado. La parte histórica contará con una gran ambientación y nos permitirá descubrir como era la sociedad y la vida en el siglo XII y las luchas de poder que hubo entre señores feudales.

Estructurada en 66 capítulos titulados cortos que le imprimen un ritmo muy ágil, “Los señores del tiempo” cuenta con una trama compleja, sólida y muy bien armada, llena de personajes bien perfilados, tramas secundarias, saltos en la línea temporal, sorpresas y giros argumentales que hacen que el lector se enganche igual que en las novelas predecesoras.

Destacar la enorme habilidad que ha tenido Eva García Sáenz de Urturi para cerrar a la perfección todas las tramas que ha ido abriendo en los dos hilos temporales existentes.

En definitiva, “Los señores del tiempo” es un perfecto broche final para una trilogía que ha tenido en vilo a muchos lectores deseando saber qué iba a pasar con Unai López de Ayala y su familia.